El día ha empezado muuuuy temprano. Damos fé de ello...
A las 8 nos estaba
esperando el autobús para una jornada emocionante, esta vez, acompañados de
niños y niñas del colegio italiano. Nos tocaba ir a ver un volcán, el volcán
Etna. Un volcán que ha entrado en erupción en este siglo. El autobús nos ha
subido hasta unos 2000 metros. Durante el trayecto hemos podido ver el paisaje
cubierto de la lava de las últimas coladas, hemos visto una casa casi enterrada
totalmente por la lava y lo que más nos ha impactado ha sido el paisaje: nevado
en lo alto del volcán, muy oscuro en los lugares por donde ha pasado la lava y
cubierto de árboles en las zonas por las que no ha llegado a pasar.
Cuando hemos llegado hemos estado jugando con la nieve,
recorriendo diferentes zonas de un pequeño cráter, nos hemos metido dentro del
cráter, hemos recogido algunas rocas para nuestros compañeros del colegio y
hemos conquistado el volcán, donde nos hemos fotografiado con la bandera de
Aragón.
Una vez en el autobús les hemos entregado las pañoletas de
San Lorenzo que siempre nos acompañan y les hemos enseñado cómo se ponen y
cuándo se utilizan… id preparando alojamiento porque los hemos invitado a todos
a vivirlas en directo.
Al llegar al sitio en el que íbamos a comer nos hemos
encontrado a la virgen de Lourdes. La comida ha sido amenizada con unas cuantas
“olas” y un juego típico polaco que algunos ya conocíamos.
Por la tarde hemos ido a visitar Taormina, un pequeño pueblo
muy cercano a Catania con un teatro griego que no hemos podido visitar porque
ya estaba cerrado, así que hemos paseado por sus bonitas calles y nos hemos
hecho muchas fotos.
Un modelo haciéndose una sesión de fotos... ¿y si salimos en el Vogue? jaja
Durante todo el viaje la emisora Comenius FM nos ha amenizado la aventura. Aquí tenéis algunos de sus participantes...
Parece curioso pero hoy nos hemos encontrado en dos momentos
con nuestro gran referente San Juan Bosco, una vez subiendo de camino al volcán
y otra en un edificio en el centro de Taormina. Nos hemos alegrado enormemente,
nos hemos sentido, de repente, como en casa.
Y llegó el momento de la despedida... tan temido... nos hemos puesto muy tristes...
Ciao bambini...
Como conclusión os diremos que ya hace cuatro días que
salimos. ¿Despegamos hacia alguna parte? Sí, hemos despegado con rumbo al
corazón de las personas. Y hemos llegado. Hemos llegado al corazón de las
gentes de aquí y a los que dejamos en Huesca. Partir fue emocionante. Regresar
es esperanzador. Las bolsas, maletas y mochilas llegan cargadas con un montón
de recuerdos, risas, lugares, amigos y… vida. Hemos sido muy felices durante
unos días especiales en lugares especiales. Ahora debemos seguir. El corazón se
nos ha llenado de banderas.
Ahora volvemos. Volvemos a casa.